Dos Crímenes, de Jorge Ibargüengoitia

RBA Libros, col. Narrativas
Barcelona, 2010 [1979]

Con este título uno podría esperar una novela criminal de las de dos más dos. Pero Ibargüengoitia no era narrador proclive a dejarse llevar por las convenciones, fueran de género o estilísticas.
Marcos es objeto de una persecución policial, injusta e inmotivada. Sabedor de que es más fácil entrar en el sistema policial que salir, tiene que separarse de su pareja y huir de Ciudad de México. Donde va a parar es a la casa de su tío, un hombre rico que vive rodeado de su familia directa y política, toda a la espera de su fallecimiento y herencia.
Marcos urde unas mentiras, bastante ingenuas, para obtener el dinero que le permita desaparecer de la vida pública por un cierto tiempo, un hecho que le complicará la vida más tarde. Pero el lector tiene la impresión de que su tío está más al caso de estas mentiras de lo que deja traslucir, pero que no le importan.
Lo que es evidente, no obstante, es la hostilidad con la que la familia recibe a Marcos. Una actitud que provoca un ambiente sórdido y, en definitiva, criminal. Tan criminal como para provocar esos dos asesinatos del título.
Cualquier resumen argumental no hace justicia a las ficciones de Ibargüengoitia. Es a base del ambiente que crea que se conforman las situaciones. En este caso son la mezquindad, la avaricia, los juegos de poderes y contrapoderes, las conspiraciones ruines, más ruines en tanto que son familiares, y los celos, los que construyen un ambiente opresivo y amenazador.
Este estilo mueve una novela a la altura de los mejores autores del género, y del cual el lenguaje y la sabiduría literaria de Ibargüengoitia la hace trascender.

Portada y sinopsis

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2 comentarios:

RebecaTz dijo...

Recuerdo que me divertí muchísimo con este libro, Lluís. Si no has leído Estas ruinas que ves, te lo recomiendo. :D
¡Un saludo!

Lluís Salvador dijo...

Hola, Andrómeda:
A Ibargüengoitia le he tomado especial devoción, de modo que tomo nota especial de este título. De hecho, no he lamentado lo suficiente su prematura muerte, porque me parece un narrador y articulista especialísimo.
Gracias por la recomendación y el comentario.
Un saludo!