Cose di Cosa Nostra, de Giovanni Falcone
Por si no lo recuerdan, Giovanni Falcone fue uno de esos jueces antimafia italianos que fue saludado unánimemente como un hombre de valor de hierro por enfrentarse a lo que parecía una lucha a muerte. En su caso, lo fue.
Pese a que en este libro Falcone dice que el ritual asesino de la mafia se ha exagerado, y que ya no es la lupara el arma ritual, sino que se emplea el kalashnikov, pese a que Falcone decía que la mafia emplea el pragmatismo y no la semántica en sus crímenes, en su caso la mafia habó, y muy alto. La carga que hizo volar su coche estaba compuesta de 500 kilos de explosivo. Semejante overkill, semejante sobrepotencia de destrucción, no era sino un anuncio para futuros jueces e investigadores, pero también una declaración de lo mucho que Falcone había incordiado a la mafia y del temor que les había causado.
Este libro recoge lo fundamental de una serie de entrevistas, o más bien reflexiones que se hace el propio Falcone, sobre la mafia. Ni personalismos, ni un panegírico de él mismo, ni un ápice de propaganda sobre lo peligroso de su cometido. Leyendo este libro, uno saca la impresión, en primer lugar, de encontrarse con un legado impresionante, en tanto constituye un manual de uso para cualquier antimafioso, y en segundo lugar, de hallarse ante una persona íntegra, un auténtico juez de estado, en un país, Sicilia, en el que tanta falta hace que el Estado se ocupe de sus asuntos.
Porque esta es una de las conclusiones más destacadas de este libro. La mafia no es un sustituto del estado, sino un estado paralelo que en primer lugar ocupa los nichos en los que el estado no entra y en segundo, si los ocupa, procura infiltrarse en ellos y subvertirlos para sus propios fines. Falcone aboga por una intervención radical, y no sólo policial: es necesario dar esperanzas y educación, porque mediante estas dos cosas el miedo desaparecerá.
En su recorrido por los entresijos de Cosa Nostra, nos encontramos con alguien que ha tenido intuiciones geniales, pero cuyas intuiciones han venido fruto de la comprensión del carácter siciliano y de sus gentes. Los centenares de horas que pasó interrogando a "arrepentidos" dieron un fruto inmenso, como fue el de conocer en profundidad los entresijos de una organización criminal que no responde a más normas que la suya. Interrogatorios que fueron realizados, como destaca una y otra vez, con el "máximo respeto", porque los mafiosos son, todos, "hombres de honor". No es un síndrome de Estocolmo. A un perteneciente a Cosa Nostra se le debe tratar con respeto, porque mediante la humillación sólo se conseguirá el silencio y el rencor. A cambio del respeto, el mafioso arrepentido responderá con la verdad. Tal vez no toda, tal vez no expresada de una forma clara, pero difícilmente mentirá. Es su carácter, y es un carácter que se les imbuye desde la entrada en la organización, tal vez desde antes.
El recorrido no es simplemente caracteriológico u organizativo. Conexiones con el extranjero, las familias internas de la mafia, las relaciones entre sus miembros, y las de la organización con el territorio, los elementos externos, el código de honor, todo es tratado de manera límpida y clara, en lo que quizá era el primer análisis en profundidad que se realizaba de Cosa Nostra, y que se desarrolla ante nuestros ojos como un relato fascinante y valeroso, mesurado y conciso, mérito de un hombre que se dejó la vida en luchar contra un cáncer que corroe su isla de nacimiento.
En colaboración con Marcelle Padovani
RCS Rizzoli Libri, col. BUR Saggi
Milán, 199111 [1991]
Existe edición castellana publicada por Eds. Barataria
Portada y sinopsis de la edición italiana
Portada y sinopsis de la edición castellana
1 comentarios:
Suena interesante. Todavía me acuerdo de cuando se lo cargaron. Fue todo un impacto.
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