tag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post909319774129090489..comments2024-03-28T13:55:12.457+01:00Comments on lecturas errantes: Steven Spielberg: El Inconformista SoñadorLluís Salvadorhttp://www.blogger.com/profile/02582467923025486625noreply@blogger.comBlogger16125tag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-33841003242765616722009-10-21T18:39:29.864+02:002009-10-21T18:39:29.864+02:00Hola, Asterión:
Los supervivientes. Los supervivi...Hola, <b>Asterión</b>: <br />Los supervivientes. Los supervivientes tienen un relato sobre Schindler. Que pueda ser deformado, parcial, ponle todas las características que quiera, de acuerdo. Pero ese relato es respetable, y ahí hay que ir con mucho cuidado, sobre todo si caminamos por el sendero histórico y no por el de la ficción. <br />Y claro que tenemos derecho a tomar posiciones. Pero, ¿a exigir a los demás a que tomen posición? Francamente, a veces tengo problemas incluso para exigirme eso a mí mismo, no quisiera entrar en la corte de justicia del pensamiento individual revestido con la toga de juez. <br />No creo que nos pongamos de acuerdo, aunque ha sido un debate muy agradable. Si hay algo que lamento (y no sólo en el caso de Spielberg, sino en general), son las posibilidades perdidas. O la pincelada o línea que sobra. O esa idea que se trasluce pero se deja perder. Me considero más plañidera de esas oportunidades perdidas que no otra cosa. Y sin embargo, y cuando una obra incita aunque sólo sea a un pequeño debate sobre la misma, algo tiene. <br />Dejémoslo aquí, si te parece. Ambos tenemos motivos razonables y razonados. <br />Estoy un poco abrumado por tu comentario sobre "mi" apocalípticos... Pero te lo contesto, seguro, a no más tardar. <br />Un saludo!Lluís Salvadorhttps://www.blogger.com/profile/02582467923025486625noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-36412608834987322742009-10-16T19:34:12.277+02:002009-10-16T19:34:12.277+02:00Aquì, lo que pondrìa un poco en duda es el caràcte...Aquì, lo que pondrìa un poco en duda es el caràcter de los hechos. No hay nada, absolutamente nada, que nos asegure que los hechos existen. Al menos, que existen de forma unívoca y comrpobable. Lo ùnico de lo que disponemos siempre es de versiones, traducciones de la realidad, una realidad que no existe como tal.<br /><br />Claro, esto no significa que no podamos, o tengamos derecho, a juzgar o a tomar posiciones. Como seres sociales, estamos obligados a transformar el mundo a partir de esas versiones.<br /><br />Saludos.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-45642089751472719222009-10-16T19:17:48.886+02:002009-10-16T19:17:48.886+02:00Hola, Asterión:
Y seguimos, claro que sí :)
Claro...Hola, <b>Asterión</b>: <br />Y seguimos, claro que sí :)<br />Claro que la historia es una construcción. Y que el intelectual la reexamina. Pero no puede cambiarla... Porque la historia se basa en hechos. Los vencedores la escriben, pero la suelen escribir de manera curiosa, resaltando ciertos hechos y dejando en sombra otros. El intelectual puede iluminarlos o destacar unos. Pero no puede evitar los hechos. Y si ese intelectual quiere responder con justicia ante su inteligencia, no puede evitarlos. <br />¿Interpretarlos? ¡Claro que sí! Pero con base. <br />En el caso de Spielberg (y ya sabes que coincido en lo fundamental contigo), lo que sucede es que se abstiene de esta interpretación, como digo, y deja que sean los contemporáneos los que juzguen, como ya lo hicieron. En uno de mis comentarios anteriores incluso dije que es posible que Spielberg se hubiera visto condicionado por una cosa, como es la ley antilibelo. Y a las dudas que tengo sobre la auténtica intención de su Schindler me remito a los anteriores comentarios. <br />Pero dejándolas aparte, de si el texto fílmico de Spielberg es ambiguo o no, no lo aclararemos porque tenemos opiniones distintas. Sí estamos de acuerdo en que está mal filmado en su parte final. Y podríamos discutir también cuándo empieza esa parte final mal filmada, si cuando se agarra la insignia de oro del partido y dice que con eso podría... o bien después, en la superflua escena del cementerio. <br />Un saludo!Lluís Salvadorhttps://www.blogger.com/profile/02582467923025486625noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-7882874476454246772009-09-30T19:04:42.260+02:002009-09-30T19:04:42.260+02:00Aquí, otra clave sería eso de "tergiversar&qu...Aquí, otra clave sería eso de "tergiversar". Todo artista, lo que hace es precisamente "tergiversar", en el sentido de que por más que quiera, su mirada no es objetiva.<br /><br />Desde que hablamos, lo que estamos haciendo es interpretar, dar una visión, particular, sobre algo. Por ello, un creador, al adaptar una novela al cine, o llevar una biografía, lo que hace es dar su propia versión. Ahí, ese artista puede inocular su visión (consicente o incoscientemente), y tratar de empujar los límites de lo que su cultura acepta o no acepta. Parte de lo "políticamente correcto" es hacernos pasar por objetivo lo que a todas lueces es subejtivo.<br /><br />El intelectual responde a los desafíos de su tiempo, claro, pero también claro que reexamina la historia, porque esta no es un producto acabado, es una construcción.<br /><br />Seguimos, jeje... Saludos...Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-64860497878608615522009-09-30T18:57:40.485+02:002009-09-30T18:57:40.485+02:00Hola, Asterión:
Gustavo, ya te prometí en otro la...Hola, <b>Asterión</b>: <br />Gustavo, ya te prometí en otro lado que seguiríamos con esto. No voy a seguir comentando La Lista... Tú crees que el personaje es plano y yo, en cambio, creo que es presentado ambiguamente; incluso con una ambigüedad culpable en cierto sentido. Habría que ver si también hubo influencias de las leyes antilibelo tan presentes en el mundo anglosajón, pero eso es otro tema. En cualquier caso, tienes esa visión y yo tengo otra y, como has repetido muchas veces, para nada se invalidan entre sí. <br />Pero en lo que sí quiero hacer hincapié es que cuando hablas de lo políticamente correcto, no estamos hablando ambos de lo mismo. Yo diría que a lo que te refieres es a que el intelectual no puede ser neutral, a que el intelectual tiene que tomar partido, una frase que ya han pronunciado tantos (y si no recuerdo mal, el propio Octavio Paz, no sé si originariamente) que sus orígenes quedan confusos. <br />Y es un concepto con el que estoy de acuerdo. El intelectual tiene que tomar parte. Pero tal como se expresa y se entiende, el intelectual tiene que responder a los desafíos de su tiempo, no reexaminar la historia. Hay que ver primero si Spielberg hace un ejercicio intelectual o no. No voy a entrar en ello. Pero lo que sí hace es narrar una historia. Decantarse por una versión u otra, en el caso de una historia real, puede hacerlo, y creo que lo hace, con limitaciones o sin ellas, gustando más o menos, pero lo que no puede es tergiversar a los testimonios. Por eso decía aquello de "que le juzguen los que le conocieron y los que estuvieron (so)juzgados a él". <br />Un muy cordial saludo!Lluís Salvadorhttps://www.blogger.com/profile/02582467923025486625noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-90911293957075479522009-09-24T12:54:55.977+02:002009-09-24T12:54:55.977+02:00Asterión, una pregunta: ¿en qué sentido se podría ...Asterión, una pregunta: ¿en qué sentido se podría haber arriesgado más con esta película? ¿Tal vez retratando a Schindler tal cual debió ser (un tío de dudosas buenas intenciones, aunque con buen resultado)? Spielberg sabe qué teclas tocar, es un experto en eso, sin duda. Y tiene sus fórmulas. No considero esta película como estudiada sólo y únicamente para provocar dolor de forma fácil, a costa del sufrimiento ajeno. Pero es que la realidad que nos retrata durante la película, la de los campos, la de la vida en el ghetto, o la desposesión progresiva de los derechos de los judíos en la Polonia de aquellos años, no debió de ser muy diferente. Muchas veces a Spielberg se le ataca por lo mismo, por su lado mercantilista. Y sí, la Lista fue un éxito arrollador. Pero qué tiene de malo vender –en el sentido de conectar con mucho público- un trabajo bueno? Creo que es una película con muchos, muchos matices. <br /><br />La ideología que subyace en esta película yo particularmente no la veo. Lo que veo claro es quienes eran las víctimas y los verdugos de la historia, de ésta concretamente. No me cabe género de dudas. Pero ligado a ese preciso momento de la historia, jamás al momento actual. Y el Schindler de la peli está en medio de esos dos extremos. <br /><br />El cine cuenta historias. Historias que pueden resultar interesantes. Y el artista puede alimentar esas historias y hacerlas grandes. A veces rescata momentos y los transforma a fin de conectar con la gente. Manipular, sesgar, esas partes sería pues algo aplicable al cine, o al arte, en general. Creo yo, vamos. <br /><br /><br />Un saludo Asterión y Lluís!<br /><br />SusanaAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-44559496263595103372009-09-23T20:49:09.424+02:002009-09-23T20:49:09.424+02:00Hola de nuevo Asterión y muchas gracias Lluís por ...Hola de nuevo Asterión y muchas gracias Lluís por todo lo que aportas en los mensajes que has escrito!<br /><br />El arte debe hurgar en la llaga, sí. Creo, como Lluís, que puede hacerlo de forma políticamente correcta. Para mí la Lista de Schindler lo hace, no con la escena final, que sí que es lo menos acertado, te doy la razón. Pero el resto de la película me llega en todos los sentidos, y el esa escena final forma parte de uno todo que no puedo, ni quiero que sea determinante quitar mérito a todo lo demás. <br /><br />Saludos!<br /><br />SusanaAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-78286170750231338242009-09-22T20:22:36.674+02:002009-09-22T20:22:36.674+02:00Bueno, Lluís, ahora sí nos metiste un buen trecho,...Bueno, Lluís, ahora sí nos metiste un buen trecho, jeje... Iba yo primero a decir algo sobre el último comentario de Suzana, pero ya se me olvidó.<br /><br />Solo recuerdo que algo iba a mencionar sobre "La vida es bella". Esta es precisamente, el otro ejemplo, y yo agrego "El pianista", donde un tema tan crucial, fuerte y todo lo demás, es tomado solamente para lograr el efecto fácil. "La vida..." empieza como una gran comedia, pero la segunda hora no se sostiene. Yo soy el primero que aceptaría todo como una fábula, pero es que precisamente no logra la suspensión del descreimiento. Simplemente, en el contexto en el que él lo pone, no es posible hacer lo que él hizo. Si hubiese seguido por la via de la comedia, el drama habría sido mejor, quizá. Pero bueno, Benigni no es Chaplin, aunque la Academia haya intentado elogiarlo como el que más.<br /><br />Yo no juzgo a los personajes desde un punto de vista moral. Juzgo el personaje, su construcción. Spielberg no nos presenta un personaje ambiguo, nos presenta un personaje plano, que responde a un solo propósito.<br /><br />Una cosa es que el autor de un texto tenga ciertos objetivos, que de todos modos no siempre consigue, y otra es que haya una agenda, consciente o inconsciente, que lo lleve a manipular.<br /><br />Disponer los elementos no es manipular. Manipular es disponerlos de un modo sesgado. En las grandes obras de arte aparecen las huellas ideológicas, claro, pero matizadas de grandes complejidades y contradicciones; en las obras menores, estas huellas son evidentes, obvias...<br /><br />Yo también puedo defender "La lista...", lo que me molesta es que el director no sea capaz de dejar de lado por un momento el enfoque de mercado y se haya arriesgado más. Es una hermosa película, pero estilizada, artificiosa, que no hurga en la llaga. Eso es lo "políticamente correcto". El arte debe hurgar en la llaga.<br /><br />Saludos.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-56355813939206161702009-09-22T19:35:55.008+02:002009-09-22T19:35:55.008+02:00Hola de nuevo.
Pero siguen estando estos detalles...Hola de nuevo. <br />Pero siguen estando estos detalles que me llevan a ciertas dudas. <br />Voy a plantear algo que puede ser una elucubración. <br />Spielberg lee una novela sobre el personaje de Oskar Schindler. Le gusta. La contrata para su paso a filme. Convendrás conmigo que para buscar matices y hallarlos se necesita un gran escritor detrás de un texto. En este caso se trata de un texto histórico novelado, probablemente no más que una relación de hechos comprobados con algo más de buena voluntad. Los matices que no se pueden percibir en el texto (que no he leído) pueden surgir a la luz cuando se reelaboran e interpretan actoralmente, cuando son pasados por el cedazo de un guión y una interpretación. Creo que Spielberg se da cuenta de que está filmando la "gesta" de un tipo, como mínimo ambiguo, posiblemente canalla, tal vez criminal demasiado inteligente. Spielberg es honesto, y deja esto como está. Pero las apuestas ya son muy altas. Spielberg es judío, conoce o se ha entrevistado con supervivientes del campo de Oskar Schindler, y se decide a incluir ese testimonio como una especie de "bueno, si ellos fueron los que le conocieron, que sean ellos quien le juzguen". <br />Como postura puede ser discutible. Cinematográficamente, sobra. Pero, si lo que hemos visto antes es un Schindler que camina entre la posible (y digo sólo posible) humanidad y el cinismo, la visión puede quedar equilibrada. No hay elementos dulcificadores en la visión que tenemos de Schindler si lo consideramos como loo que en definitiva fue: alguien que estuvo en la cresta de la ola del nazismo y que salió indemne de él. <br />Y llegamos a la escena del llanto. Ya digo que la he acabado de volver a ver hace poco. Hay algo que me chirría. Es demasiado histriónica. Tanto que puede llegar a ser la última muestra de ambigüedad del personaje. ¿Estamos ante una manifestación sincera de Schindler o ante el último fingimiento de un cínico en el momento de su más dura prueba? <br />No sé dar la respuesta. Pero también me cuesta creer que alguien que ha sido tan transgresor y políticamente incorrecto como Spielberg en Salvar al Soldado Ryan permitiera una actuación así, tan exagerada, tan poco controlada, tan extremada, tan irreal, a sabiendas. Tengo esa duda. Y no sé si la resolveré. <br />Un saludo a ambos y, de corazón, perdonad mi prolijidad y espero que sigáis dialogando. Lo mío sólo ha sido, como ya he dicho, un cuarto (largo y farragoso) a espadas.Lluís Salvadorhttps://www.blogger.com/profile/02582467923025486625noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-242868163268496602009-09-22T19:35:04.467+02:002009-09-22T19:35:04.467+02:00De nuevo aquí.
La Lista de Schindler. Gustavo, me...De nuevo aquí. <br />La Lista de Schindler. Gustavo, me gusta tan poco como a ti ese final documental (que sobra, se mire por donde se mire) y esa escena del llanto de Oskar Schindler. Casualidades de la vida, pasaron la lista por televisión hace un par de semanas, y su nueva visión no es que me hiciera rectificar mis apreciaciones, pero sí fijarme en unos cuantos detalles. <br />Sigo pensando que a Oskar Schindler no le estrecharía la mano. Sigo considerándolo un personaje ambiguo, arribista y trepa, y sigo creyendo que, con perdón era más un cabroncete que no una persona tocada por fin por el dedo de la humanidad (yo, es que soy muy raro: fui uno de los que bramaban a la puerta del cine después de ver El Último Emperador de Bertolucci; cuando todos consideraban que esa era una película bellísima, yo estaba de acuerdo, era una película bellísima, pero una biopic sobre un tipo que, como mínimo, era un impresentable, y hasta más que probablemente un criminal de guerra). En esta revisión hubo una escena muy reveladora para mí: es cuando la chica va a pedir una entrevista a Oskar Schindler para salvar a sus padres. Pide la entrevista, aparece Schindler en lo alto de la escalera, la mira y acto seguido niega la entrevista. Vuelve maquillada, con un vestido más provocativo, aparece Schindler y le concede la entrevista. Quienes recuerden la escena saben cómo transcurre. Lo importante aquí es que, aunque no se la lleve a la cama, la chica ya se ha prostituido. Para mover a piedad a Schindler, de una manera u otra hay que pagar. <br />Hay otros detalles de este estilo. Schindler compra judíos para salvarlos pero, ¿está quizás comprando su propia salvación con este gesto? Sobre todo, cuando los paga con unos reichsmarks que el propio Schindler sabe que no le servirán para nada a corto o medio plazo (hay una ausencia notable en la película de Spielberg, una ausencia demasiado ambigua, te lo reconozco; no hay una referencia a cuándo pasan las cosas. No me refiero a la fecha, sino a dejarnos claro el pre y postStalingrado, por ejemplo, el punto de inflexión en la mentalidad alemana). Otra cosa es, si como dice la película, quien salva una vida salva el Mundo. Es un mensaje posible, con el que se puede estar de acuerdo o no. <br /><br />(Interrupción de nuevo, sorry)Lluís Salvadorhttps://www.blogger.com/profile/02582467923025486625noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-49870912099998523952009-09-22T18:47:35.778+02:002009-09-22T18:47:35.778+02:00Hola de nuevo.
Segundo, y ya sabía que hacer un a...Hola de nuevo. <br />Segundo, y ya sabía que hacer un artículo sobre Spielberg en su totalidad, incluyendo La Lista de Schindler, sería como mentarte la bicha, déjame establecer una serie de puntos, ya que no estoy como defensor del artículo, sino como comentarista de a pie. Me cae simpático Spielberg, por varios motivos. Por formar parte del terceto (junto con Lucas y, creo, Coppola) que se reunieron y permitieron que Kurosawa pudiera seguir rodando. Y gracias a ellos hemos podido disfrutar de Los Sueños de Akira Kurosawa, una prodigiosa película de un director prodigioso. Porque el género de la aventura no sería igual (y otra cosa es la última parte y las imitaciones que surgieron, algunas de ellas muy dignas) si no se hubieran realizado, puestos a ser elitistas, la primera y la tercera de las sagas de Indy. Porque todavía recuerdo cómo me llevó mi tío a ver Tiburón, y recuerdo perfectamente el estar inclinado hacia adelante en mi butaca y retroceder sobresaltado ante la primera aparición del bicho (que, aunque tiene nombre, tanto está emparentado con "La Cosa Sin Nombre" uno de los arquetipos básicos del cine de terror). Como, ya un poco más mayorcito, me quedé en casa viendo una película que había adquirido carcteres de leyenda en el género, como era Duel. Y que ya prefiguraba ese tiburón, y esa cosa sin nombre. Recuerdo haber sido crítico con ET. Pero también recuerdo que Spielberg era alguien que no se conformaba con lo que se podía obtener barato. Se empeñó y consiguió escenas maravillosas. ¡Qué caramba! recuerdo a mi héroe entre héroes de la cinematografía, François Truffaut, interpretando su papel en Encuentros en la Tercera Fase. Algo debía de tener ese tipo Spielberg para que un tipo como François le diera el espaldarazo de intervenir en su película. <br />Todo esto viene porque el artículo de Susana trata del cine de Spielberg y no sólo de una película. Y ahora pasaré a comentar La Lista de Schindler, y a entrar en el debate. Pero el número de caracteres de los comentarios es limitado, y no quiero rebasarlos. <br />Hasta ahora y un saludo cordialísimo a los dos!Lluís Salvadorhttps://www.blogger.com/profile/02582467923025486625noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-40006044405424640852009-09-22T18:46:30.764+02:002009-09-22T18:46:30.764+02:00Hola a ambos, Asterión y Susana:
Bueno, brevemen...Hola a ambos, <b>Asterión</b> y <b>Susana</b>: <br /><br />Bueno, brevemente en el primer punto: lo que tenía que decir de Susana Rizo lo dije en los comentarios a su primera colaboración en este blog, que siempre tengo que agradecer,<br /><a href="http://lecturaserrantes.blogspot.com/2009/03/la-escritura-o-la-vida-de-jorge-semprun.html" rel="nofollow">La Escritura o la Vida, de Jorge Semprún</a><br />Pueden aprovechar y ller su reseña/artículo. <br /><br />Y ahora, como espectador privilegiado, tengo derecho a echar mi cuarto a espadas sobre el tema. <br />Gustavo, ¿realmente el arte no puede ser políticamente correcto? Otra cosa es si debe serlo, y esa es una postura ideológica, un terreno pantanoso en el que hallaríamos puntos de contacto, pero ¿no puede? Yo diría que el arte políticamente correcto puede existir, y no por ser políticamente correcto deja de ser arte. Las películas de Frank Capra, por ejemplo. O, en otro orden de cosas, El Acorazado Potemkin. O, por mencionar la mayor contradicción que he hallado en el arte, Triumph des Willens, El Triunfo de la Voluntad de Leni Riefenstahl. No puedo (y ya me gustaría, no creas) decir que esta película no es arte (como no puedo decir que la obra de Eisenstein no es arte), por muy repulsivo que sea su mensaje. Un mensaje, no hay que olvidarlo, en todos los casos, adecuado y políticamente correcto en su época y para los esquemas mentales y sociopolíticos de su época. Lo políticamente correcto es algo muy móvil dentro de los esquemas de la sociedad y, justamente, los que nos ocupamos de la literatura o el cine tenemos esa misión de identificar los paradigmas de pensamiento de las épocas en las que se producían las obras y enclavarlas y explicarlas (y, hasta cierto punto, justificarlas) en su época, definiendo su enclave en esa sociedad. El arte o lo que constituye arte no tiene nada que ver con esto. No es correcto hablar de algo que no es arte por ser políticamente correcto, como no es posible hablar de arte "degenerado". Observa esta curiosa expresión semántica, arte degenerado. Arte al fin y al cabo, de una manera u otra, ¿verdad? <br />Blogger no me permite más por el momento. Ahora vengoLluís Salvadorhttps://www.blogger.com/profile/02582467923025486625noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-30334023137413866752009-09-22T13:38:58.061+02:002009-09-22T13:38:58.061+02:00Sigamos, Asterión. Veo que el final de Schindler e...Sigamos, Asterión. Veo que el final de Schindler es tal vez lo que más reticencias despierta en la película, e insisto que es la parte que menos me gusta, pelín excesiva y teatral. Pienso que durante toda la película el tema del dolor y el horror del holocausto está tratado con suma elegancia y delicadeza. <br /><br />Desde el momento en que se toma esa historia el artista buscará unos objetivos y tratará de conducir al espectador hacia los mismos, luego podríamos hablar de manipulación desde el primer momento, no? no creo que sea un recurso negativo ni el cine, ni en cualquier arte. La vida es bella, por ejemplo, es una fábula, trata de hacer que creamos en una esperanza que era imposible en ese lugar. Es un cuento. Eso también es manipulación (por cierto, Semprún nunca ha podido acabar de ver esa película). <br /><br />A mí no me importa que “manipulen” en el sentido que den con la tecla para conectar con las emociones. Luego yo sé cuáles son las fronteras y en qué partes ha sabido hacerlo con sutileza y maestría. No es en esa escena en la que yo casi saco pañuelo: en cambio sí lo hice cuando aquella fila de judíos anónimos entra en la cámara de gas, mientras los oficiales les sonríen. O cuando ellas regresan de Auschwitch tras aquel error burocrático, en silencio, con las cabezas rapadas. O me quito el sombrero con los juegos de cámara al inicio de la película. Las selecciones con música de fondo del campo de Paszow. Los niños cantando aquella canción y llevados a un lugar sin destino en aquel camión mientras las madres corren tras ellos llenas de desesperación. O la matanza bestial del ghetto de Cracovia, y la música de Mozart sonando al piano mientras un hombre es acribillado a tiros en las escaleras. Helen Hirsh aterrorizada y sin saber qué contestarle al psicópata de Amon Goeth. Las miradas de los actores, los fundidos de la cámara… me conmueve esa perfección formal, con la luz hablando por sí misma. Ahí es donde digo, ole tus huevos Spielberg, Maestro (discúlpame la expresión). <br /><br />Spielberg nos ha contando una historia y al final quiere llegar a una verdad y mostrar al Schindler que tomó de la realidad. Nos muestra una persona que es vulnerable, que alberga buenas intenciones, y que de repente se da cuenta que podría haber hecho algo más. La guerra ha terminado, él ha cambiado, les ha tomado cariño a sus judíos, aunque al principio parece obrar egoístamente. Fíjate en qué momento pierde él los papeles: cuando le entregan ese anillo hecho con el oro de la muela de alguien (decían algo como “gracias, señor Derek”). Ellos no tienen nada, y le dan ese anillo con la inscripción (quien salva una vida, salva un millón), y justo en ese momento él ve a la gente a la que ha salvado la vida. Spielberg no quiere dejar dudas al final sobre su personaje. A mí me resulta creíble. No sé si es un final fácil, pero tengo claro que la película en sí es difícil. Asterión, ¿qué final le habrías puesto tú? <br /><br />Igual nos pasamos así un montón de posts. Yo es que pienso que es una obra maestra, es mi opinión personal. No me ha manipulado: me ha emocionado en muchos aspectos. Las cosas fueron como fueron, y no hubo cabida para historias bonitas allí, en el Holocausto, lo sé. Pero el cine está en parte para inventar lo que no existió. <br /><br />Respecto el tema, hay otros trabajos buenísimos (shoah, sin ir más lejos) igual la has visto. <br /><br /><br />Bueno, un saludín, y nada, si quieres seguimos ;)<br /><br />Y gracias por comentar, por cierto!<br /><br />SusanaAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-6240627183086621992009-09-21T20:49:26.815+02:002009-09-21T20:49:26.815+02:00Aquí seguimos, Susana, siempre en buena lid, jeje:...Aquí seguimos, Susana, siempre en buena lid, jeje:<br /><br />El problema de Schindler llorando y lamentándose no tiene nada que ver con el Schindler "real". De hecho, el arte no tiene nada que ver con la "realidad". Es decir, más allá de que sus llanto fuera fundado o no, se trata de la ubicación estratégica en la película, que a fuerza de falta de mayores metáforas para conmover, opta por la vía fácil, la del mártir, la del hombre entregado, del cual nadie va a dudar. Ahí no hay matices, solamente manipulación formal.<br /><br />Saludos.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-2791176830829718702009-09-21T20:07:18.538+02:002009-09-21T20:07:18.538+02:00Hola Asterión. Una cosa: ¿crees que Spielberg fue...Hola Asterión. Una cosa: ¿crees que Spielberg fue políticamente correcto en Munich, o en El Imperio del Sol? yo pienso que un artista es libre de experimentar con lo que quiera, y que debe ser ante todo honesto consigo mismo. No sé si Spielberg habrá querido ser correcto con determinadas ideologías, a mí me parece que ha sido fiel a sus propias ideologías, lo que no quita que el hombre sea inteligente y hábil -que lo es- para "conquistar" por decirlo de alguna manera, mucha audiencia. Pero tiene todo el mérito y creo que se lo merece. <br /><br />En cuanto lo que comentas de la Lista de Schindler, ese es un argumento que he escuchado muchas veces. Yo pienso que por qué no iba a ser creíble ese Oskar que se derrumba al final, y eso que reconozco que no es la escena que más me gusta de la película, pues quizás es un poco excesiva. Schindler fue una persona al parecer muy ambigua en su vida real, y en la película Spielberg consigue transmitirlo, en mi opinión. ¿Obraba Schindler por sus propios intereses o por salvar a los demás? pues yo creo que por las dos cosas, lo que sucede es que el personaje sufre una evolución y al final se decanta por lo que se decanta....<br /><br />Ya seguiremos si quieres. <br /><br />Un saludo!<br /><br />SusanaAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6000645721798071306.post-58239470703452517402009-09-20T17:35:46.762+02:002009-09-20T17:35:46.762+02:00Más allá del afán mercantilista que se le puede cr...Más allá del afán mercantilista que se le puede criticar, y que muchas veces se le cobra, lo que sucede con Spielberg es que siempre es "políticamente correcto", y el arte, sencillamente, no puede ni debe serlo.<br /><br />El mejor ejemplo es "La lista de Schindler". En esa película, Spilberg tenía en sus manos una obra maestra, y la echó a perder por su manía lacrimógena que nadie se traga de Schindler llorando por lo que pudo haber hecho, y el colmo, la escena de esos abuelitos multicolores que dura como diez minutos.<br /><br />Ciertamente, en una serie de aspectos, tanto Spielberg como Lucas definieron varios elementos de una época, un estilo y demás, pero estética y éticamente, siempre al servicio de ideologías estrechas y de miras cortas, como lo es la cosmovisión de los estadounidenses como nación.<br /><br />Saludos.Anonymousnoreply@blogger.com