Scaramouche, de George Sidney

SESIÓN MATINAL

(Scaramouche); 1952

Director: George Sidney; Guión: Ronald Millar y George Froeschel, basado en la novela de Rafael Sabatini; Intérpretes: Stewart Granger (André Moreau/Scaramouche), Mel Ferrer (Noel, Marquis de Maynes), Eleanor Parker (Lenore), Janet Leigh (Aline de Gavrillac de Bourbon), Henry Wilcoxon (Chevalier de Chabrillanne), Nina Foch (María Antonieta), Lewis Stone (Georges de Valmorin), Robert Coote (Gaston Binet), Richard Anderson (Philippe de Valmorin "Marcus Brutus"); Dir. Fotografía: Charles Rosher; Música: Victor Young; Dir. Artística: Cedric Gibbons y Hans Peters; Coreografía de combates: Jean Heremans.

Esta semana les he hablado de Scaramouche, la novela. Ya saben que las versiones difieren, para bien en ambos casos. Esta película ha sido definida como un musical sin música (o, para ser más precisos, sin canciones) y es una acertada descripción.
En glorioso (nunca mejor dicho) tecnicolor, con un vestuario esplendoroso, con un guión algo más allá del código Hays, unas interpretaciones grandiossas en su género, aprovechando lo mejor de la novela y lo mejor del lenguaje fílmico, bellamente coreografiada, esta aventura se erige como una de las más perfectas jamás filmadas, con acción, ironía, suspense e incluso algo de mensaje.
Posee el duelo a espada más espectacular y largo de la historia del cine, y sólo esa escena ya vale verla una y otra vez.





Pero no les voy a dejar en ascuas. Ese famoso duelo a espada, de seis minutos y medio, pueden verlo clicando en este enlace. Coreográfico, acrobático, real (con muy pocos dobles; Stewart Granger recibió doce puntos de sutura en una pierna) y maravilla del género (se suprimió la música para dejar sólo el sonido de las espadas y las exlamaciones y jadeos del público y los espadachines, y se instalaron micrófonos para captar el sonido de las espadas sobre el mobiliario y decorado), con unos Stewart Granger y Mel Ferrer más allá de la plena forma.

btemplates

3 comentarios:

Mannelig dijo...

Entretenidísima película, sí señor.

Carlos dijo...

Totalmente de acuerdo con tus apreciaciones sobre la película. Divertimento de principio a fin, con Granger en plena época aventurera (aunque lo prefiero en El prisionero de Zenda y especialmente en Los contrabandistas de Monfleet). Mi laguna es que no he leído la obra. Un placer compartir tan buenos gustos.

Lluís Salvador dijo...

Hola, Mannelig:
Gracias por el apoyo.
Intento traer estas películas para que las que no las han visto las descubran, y vean que siguen siendo muy válidas y que pueden enseñar más de una cosa a los cineastas modernos. No ha habido otro duelo a espada tan espectacular como el de Scaramouche...
Un saludo!

Hola, Carlos:
Y como Allan Quatermain, no lo olvides. Para mí Allan ya quedará siempre con el rostro de Stewart Granger. Y tienes razón en que El prisionero de Zenda y Moonfleet tienen duelos muy interesantes (uno con James Mason y el otro con una especie de monstruo de arma, un hacha de asta larga). Pero te recomiendo también la lectura de la novela. Si te gusta el género de aventuras, es una de las cumbres, junto con los Mosqueteros, Moby Dick, Conrad y pocas más.
Un saludo!